Cómo entrenar a tu dragón

Furia Nocturna

La especie más rara e inteligente de dragón, el Furia Nocturna se distingue por su color oscuro y sus penetrantes ojos amarillos, así como por su tamaño, más pequeño, su amplio pecho y su cuello corto. Al tener las alas más grandes de todos los dragones en proporción a su cuerpo, puede volar más rápido, más alto y más lejos que cualquier dragón, y la increíble proporción entre su potencia y su peso le hacen capaz de despegar verticalmente. Sin embargo, toda esa gracia en el aire se convierte en torpeza en el suelo. Su poco convencional fuego (una masa semi-sólida que prende con una llama de acetileno y oxígeno) explota al chocar contra el objetivo. Su forma típica de atacar es después de la puesta del sol y desde una gran altura: envuelto en sus alas, se deja caer como una bala, enderezándose en el último momento para soltar un ataque explosivo y preciso. y volviendo después a desvanecerse en la oscuridad. El único aviso es el ruido como de un proyectil que hace el Furia Nocturna cayendo en picado. Su ataque en plan kamikaze, así como su comportamiento precavido y su mente analítica, convierten al Furia Nocturna en un devastador oponente con una elevada tasa de éxitos. Hasta la fecha, ningún Furia Nocturna ha sido derribado.

Nader Mortífero

No te equivoques, porque el Nader Mortífero, con sus bonitos colores (tiene unos tonos tropicales tan vívidos y variados como los de un loro) es también extremadamente peligroso. Es caprichoso y agresivo, y tiene un genio vivo y explosivo, avivado aún más por su gran vanidad. Su ataque tiene dos fases: puede expeler magnesio puro (el fuego de dragón más ardiente) a cientos de metros, y además puede lanzar una oleada de espinas letales con un latigazo de su cola. Esto (junto con el hecho de que su peligrosidad en el aire es superada por su peligrosidad en el suelo) le convierte en uno de los dragones más difíciles de combatir. Con una patas musculosas y ágiles, también puede cubrir su cuerpo de espinas y defenderse con su potente pico curvo. Su cabeza le sirve también como un ariete, capaz de derribar los muros y puertas más resistentes. Su punto débil es su vista: al estar sus ojos a los lados de su cabeza, el Nader Mortífero tiene un amplio punto ciego justo enfrente de él.

Pesadilla Monstruosa

Especie emblemática de dragón, el Pesadilla Monstruosa es la especie de dragón de aspecto más terrorífico e icónico que se conoce. El Pesadilla Monstruosa, mayormente negro y rojo, es violento, obstinado y tenaz, el primero en entrar en combate y el último en marcharse. Está dotado de una visión excepcionalmente buena y de unas alas extensibles que le hacen parecer aún más grande e intimidante a ojos de sus enemigos. Puede atacar tanto desde la tierra (agarrándose a los muros y utilizando su enorme boca y sus largos cuernos en las distancias cortas) como desde el aire, aunque sus enormes alas le vuelven lento en el suelo y su tamaño le convierte en un blanco fácil. Eso está compensado por su coraza de espinas y por su mayor arma, un fuego de gel de keroseno. Este potente y pegajoso fuego se adhiere a la superficie y penetra por grietas y trincheras, haciendo que sea casi imposible de apagar. Su estrategia consiste en cubrirse con fuego de la cabeza a la cola y atacar a su enemigo mientras arde.

Groncle

El Groncle se distingue por su cuerpo robusto y sus alas relativamente pequeñas, las cuales pueden aletear a una velocidad tremenda, dándole la capacidad de volar hacia atrás o hacia los lados. Al Groncle le encanta dormir, y a veces se le puede ver echando un sueñecito mientras vuela o se apila con otros como él, formando un montón gigantesco de dragones dormidos. Reparte su tiempo de la siguiente manera: Volar: 1%, Comer: 5%, Quejarse: 10%, y Dormir: 84%. Cuando ataca, el Groncle golpea y aplasta a sus enemigos con su cola extensible, que tiene una bola como una maza en la punta, o utilizando su cabeza como ariete. Pero lo más mortífero es su fuego: ingiere cientos de kilos de rocas que transforma en lava fundida, la cual combina con el oxígeno (de su respiración) y lanza contra su atacante como una bala de cañón en llamas. Su talón de Aquiles es su pésima vista, llegando incluso a confundir las piedras con huevos suyos y a sentarse sobre ellas para incubarlas.

Cremallerus Espantosus

El más raro de todos los dragones, el Cremallerus Espantosus es fácil de distinguir (y también es fácil adivinar por qué se le llama así): sólo hay que fijarse en sus dos cabezas, cada una de ellas en cuellos separados que pueden "abrocharse" como una cremallera. Aunque es el dragón más grande, también es el que tiene las alas más pequeñas, junto con unas patas cortas y fornidas, así que ni es muy bueno en el aire ni muy eficaz en tierra. Da igual, porque su extraño ataque es especialmente letal. En lugar de expulsar fuego, una de las dos cabezas produce un gas inflamable, mientras que la otra lo inflama con una chispa. Puede, por tanto, atacar desde muy lejos, y el gas se infiltra por los rincones y las rendijas antes de ser inflamado. Sus limitaciones físicas y su torpe cerebro han provocado la casi total extinción de esta bestia. Su mayor fuerza (sus dos cabezas) es también su mayor debilidad, pues sus dos mentes distintas y limitadas a menudo no se ponen de acuerdo, lo cual le paraliza y le vuelve vulnerable. Así, muchos vikingos juntos pueden confundirle y derrotarle. Los Cremallerus macho a menudo se provocan a sí mismos hasta que explotan, las hembras son más razonables y viven más tiempo.

Terrible Terror

De todos los dragones conocidos, el Terrible Terror es tanto el de tamaño más pequeño como el más numeroso en población. Aunque viaja en manadas, pierden su superioridad numérica por estar constantemente enzarzados en disputas internas, en lugar de concentrarse en diseñar un plan de ataque conjunto. Eso los hace ineficaces en la batalla, así que rebuscan su comida entre las basuras en lugar de cazarla. Ya que el Terrible Terror no puede volar grandes distancias, se acopla con dragones más grandes para que le lleven a remolque. La alta tasa de reproducción de estos dragones y su actitud de no enfrentamiento con los seres humanos han hecho que proliferen pese a sus limitaciones. Aunque se calcula que hay miles de Terrores, pocas veces se ve uno. Algunos vikingos se pasan toda la vida sin ver a ninguno.

Muerte Roja

Aunque se le considera generalmente el amo de todos los dragones, en la actualidad se sabe poco del Muerte Roja, la Serpiente de Midgard, pero esto es lo que se cree: un Muerte Roja vive 2.000 años, y justo antes de morir pone 3.000 huevos. Tras salir del cascarón, las crías se pelean y se matan entre ellas hasta que sólo queda un dragón dominante, y según la leyenda eso puede tardar hasta 100 años. Algunos piensan que su lucha a muerte es en realidad una lucha por el territorio, con el vencedor definitivo dominando el centro del mundo y unos pocos supervivientes exiliados en remotas regiones. Eso podría explicar las leyendas sobre serpientes gigantes que existen a menudo por todo el mundo, en lugares como China, África y Rusia. Al contrario que otros dragones, el Muerte Roja puede vivir toda la vida en una caverna, alimentándose de la comida que le traen los dragones subordinados, así que no es extraño que sean tan difíciles de encontrar. Claro que, si uno de ellos tiene hambre y anda en busca de comida, por supuesto que podría encontrarte.