Mil noches, una boda

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Angélique acaba de cumplir 60 años, pero no se siente vieja. La mejor prueba de ello es que sigue trabajando en un cabaret de la frontera francoalemana. Y su interés por los hombres es más fuerte que nunca. Para ella no hay nada como la vida nocturna, aunque ello suponga dormir poco y lidiar con un montón de desconocidos. La mayoría de hombres la tratan como mercancía, hasta que aparece Michel (Joseph Bour), un minero retirado, amistoso y simpático, que le propone casarse con él. Angélique se lo piensa: ¿la respetarán como mujer después de tantos años de desenfreno? ¿Y qué opinará su familia?