Nick & Norah: Una noche de música y amor

Las localizaciones de Nick and Nora: Una noche de música y amor es un diario de viaje de la ciudad de Nueva York, del lujo y de los bajos fondos, desde el famoso club punk de la parte baja de la ciudad Crash Mansion, Grace Church, el estudio Electric Ladyland, la terminal de bus Port Authority, el café Veselka en East Village hasta el venerable puesto proveedor de perritos calientes, Gray's Papaya. Encontrar los sitios apropiados era esencial para los realizadores, aunque hubiera sido más económico y más fácil de rodar en, por ejemplo, Toronto y hacerlo pasar por Nueva York.

El productor Andrew Miano fue inflexible, la película se tenía que rodar en Manhatan. "En primer lugar, como productora, tratamos de rodar la película aquí, antes que irnos fuera del país. Y lo más importante es que la ciudad tiene su propio pulso, tanto si vemos el Empire State en el fondo o navegamos entre el tráfico o cosas así que no se pueden lograr en ningún otro sitio".

De todas maneras, cada noche representó un reto diferente, según cuenta Kerry Kohansky. "Cuando tienes un presupuesto limitado y un tiempo limitado, sólo tienes oportunidad de hacer una toma. Pero Nueva York tiene esa energía frenética que es tan apropiada para este filme. Porque la noche de Nick y Norah es acerca de todo esto".

"Hemos estado rodando en el Lower East Side a las 4 de la mañana", continúa Kerry. "La gente salía de los bares y caminaba entre nosotros. Y aunque contratamos extras, en realidad no los necesitamos porque estaba toda esa potente energía que llenaba el plano. Cuando rodábamos y terminábamos a las 6 de la mañana, se sentía que la noche recién había acabado. Y esa es la manera en la que sientes cuando estás toda la noche deambulando por la ciudad de Nueva York".

Ari Graynor encontró la experiencia de rodar en las calles de la ciudad totalmente estimulante. "Nueva York es muy especial, es mi ciudad favorita del mundo y tiene una energía que ningún otro sitio tiene y el hecho de que estemos capturando eso y lo mostremos y sobre todo ser parte de ello es realmente increíble".

"No creo que nos hubiéramos divertido tanto si hubiésemos rodado en otro sitio, porque en otra ciudad todo habría estado cerrado", dice Michael Cera. "En Nueva York, hay gente que está despierta cuando todo esto está pasando".

La ciudad presta su 'brillo' especial a la película, incluso a la fotografía. "Mucho en la película es cámara en mano", cuenta Peter Sollett. "Casi toda está rodada con teleobjetivo, que da una sensación de cinema verité. Pero con los teleobjetivos, especialmente por la noche, tienes una distancia focal muy corta, por lo que las luces del fondo se ven muy difuminadas. Y tiene un tinte bastante romántico, una sensación cálida y suave".

"Hay una secuencia en donde Nick está hablando por teléfono. Él cuelga y mira a Norah que está de pie en la esquina tratando de pillar un taxi. Este plano tiene un punto abstracto y muy colorido. Parece que hay muchas luces flotando alrededor de la cabeza de Norah. Y eso es algo bastante normal con los semáforos de Nueva York y las luces de las aceras, pero con esos objetivos, todo comienza a verse glorioso".

Nick y Norah tienen su propio recorrido por Nueva York en el Yugo amarillo chillón del año 1980, coche que a primera vista no da mucha confianza.

"El Yugo es un coche yugoslavo de bajo presupuesto de finales de los 80", explica Sollett. "No se fabrican más y es muy pero muy difícil rodar en un coche de tamaño tan ajustado. El equipo tuvo que aprender un poco en el camino".

"Para las secuencias en las que se conducía, en general poníamos al Yugo en un remolque y lo rodeábamos de cámaras, pero había momentos en que teníamos que tener cámaras dentro del coche, por ejemplo en la escena en que Caroline se encierra en el coche y queríamos rodar desde su punto de vista. Fue una hazaña".

"Es un coche muy minúsculo", continúa. "Desde que Michael y Kat se comienzan a conocer, muchas de las situaciones que los personajes están experimentando las vemos en a través de los espejos. Han sido empujados a esta situación en este coche pequeñísimo donde tienen que apoyarse el uno al otro y las cosas van demasiado rápido para que sean cómodas.